¿A qué nivel se compromete uno ante la sociedad? ¿Cuál es la responsabilidad del individuo en la sociedad? ¿Qué responsabilidad tienen aquellos que nos representan, han de ser ejemplares o héroes?

Hacemos una elipsis entre lo acontecido durante el intento de golpe de Estado de 1981 con la situación política y económica actual, apostando por la emancipación de los individuos y la igualdad de inteligencias como estrategias de creación y participación del público.



¡Quieto todo el mundo! y el país se congeló de miedo. Pareciera que la democracia triunfó en España gracias a la inmovilidad. Encontramos ahora un paralelismo con una sociedad que está paralizada ante los golpes a los derechos sociales y un país que se mantiene a la espera. Como expresa Naomi Klein en su libro La Doctrina del Shock, la crisis económica y el golpe de los mercados neoliberales parecen una vez más dejarnos en estado de shock, sin saber reaccionar y con miedo a perder nuestras pequeñas parcelas individuales de privilegios, sin opción a ver el plano general y el estado de los Estados.